Vídeo documento dirigido por el ya fallecido y entrañable Dr. Jimenez del Oso sobre este pintor-canalizador creando desde la energía de los grandes maestros
Alguien que asistió a una sesión de este médium Brasileño escribió:
“Ante la observación de cómo ejecuta las obras, con los medios de que dispone y en las circunstancias que lo hace (a oscuras iluminado solo con infrarrojos; sacando los colores con la mano de dentro de un cajón en donde los tubos de pintura se mezclan, etc) y en el tiempo rapidísimo que lo ejecuta con manos o pies, sin pinceles, uno queda asombrado.
Por otra parte, permanece en un estado semi letárgico donde su mente parece dormida, pero sus manos "vuelan" mientras ejecuta las obras.
No soy experto en arte, pero por el estilo y las firmas de los cuadros, los expertos admiten que inexplicablemente parecen originales de los pintores firmantes.
Para mi es una demostración palpable y evidente de que la vida después de esta vida es una realidad. Los espíritus de aquellos pintores fallecidos, siguen siendo tan artistas como lo eran aquí; la muerte no ha mermado su arte, y las obras ejecutadas lo afirman de por sí. La energía que transmiten a Gasparetto es imponente cuando se le ve ejecutar las obras. Es un médium de unas características asombrosas, pues de esta clase se conocen muy raros casos”
Soy consciente que el tema de los médiums siempre es delicado. Normalmente mucha gente se cuestiona si existen esos espíritus desencarnados que contactan con uno, o si simplemente el poder de nuestra mente es tan grande e ilimitado, que tal vez somos capaces de lograr cosas desde el subconsciente que no podemos explicar, como expresar talentos que creemos no son nuestros, desdoblándonos en otras personalidades que los desarrollen por nosotros.
El otro tema es, para los que sí creen en espíritus, si el contacto que se da con el médium es en realidad procedente de seres de bajo astral que se quedaron atrapados entre planos de existencia por estar todavía aferrados a la vida material o a un sentimiento no superado y engañan o manipulan la mente de los vivos, o realmente es cierto que hay seres desencarnados que deciden permanecer en este plano para ayudarnos desde una conciencia superior. Eso se acercaría a la figura del ángel que tanto conocemos a través de las religiones.
Cuando pinto mis cuadros, siempre me acompaña la sensación de que no estoy solo. No hablo de espíritus, más bien de conexión con algo mayor. Es como si entrara en un estado de semi trance donde el tiempo desaparece. Creo firmemente que toda forma de creatividad abre las puertas del no tiempo, de la conexión con nuestra conciencia infinita.
Durante esa reconexión con nuestro flujo real de información, teniendo en cuenta que todo es energía conectada entre sí y que nada está realmente separado, no me parece descabellada cualquiera de las posibilidades. Conexión es conexión, y la cuántica ya nos ha demostrado que todas las posibilidades de existencia pueden estar conviviendo en realidades paralelas en un eterno ahora.
El caso es que emisor y receptor vibren en una frecuencia similar. Y eso vale igual para diferentes planos de existencia. Lo mismo vale para conectar con la conciencia universal que con la energía del abuelo que murió o el artista que desea seguir pintando, como con una parte de uno mismo desde otra realidad paralela.
A partir de ahí, saquen ustedes sus propias conclusiones una vez hayan visto trabajar a este peculiar médium llamado Luiz Gasparetto.
Víctor Brossa
Alguien que asistió a una sesión de este médium Brasileño escribió:
“Ante la observación de cómo ejecuta las obras, con los medios de que dispone y en las circunstancias que lo hace (a oscuras iluminado solo con infrarrojos; sacando los colores con la mano de dentro de un cajón en donde los tubos de pintura se mezclan, etc) y en el tiempo rapidísimo que lo ejecuta con manos o pies, sin pinceles, uno queda asombrado.
Por otra parte, permanece en un estado semi letárgico donde su mente parece dormida, pero sus manos "vuelan" mientras ejecuta las obras.
No soy experto en arte, pero por el estilo y las firmas de los cuadros, los expertos admiten que inexplicablemente parecen originales de los pintores firmantes.
Para mi es una demostración palpable y evidente de que la vida después de esta vida es una realidad. Los espíritus de aquellos pintores fallecidos, siguen siendo tan artistas como lo eran aquí; la muerte no ha mermado su arte, y las obras ejecutadas lo afirman de por sí. La energía que transmiten a Gasparetto es imponente cuando se le ve ejecutar las obras. Es un médium de unas características asombrosas, pues de esta clase se conocen muy raros casos”
Soy consciente que el tema de los médiums siempre es delicado. Normalmente mucha gente se cuestiona si existen esos espíritus desencarnados que contactan con uno, o si simplemente el poder de nuestra mente es tan grande e ilimitado, que tal vez somos capaces de lograr cosas desde el subconsciente que no podemos explicar, como expresar talentos que creemos no son nuestros, desdoblándonos en otras personalidades que los desarrollen por nosotros.El otro tema es, para los que sí creen en espíritus, si el contacto que se da con el médium es en realidad procedente de seres de bajo astral que se quedaron atrapados entre planos de existencia por estar todavía aferrados a la vida material o a un sentimiento no superado y engañan o manipulan la mente de los vivos, o realmente es cierto que hay seres desencarnados que deciden permanecer en este plano para ayudarnos desde una conciencia superior. Eso se acercaría a la figura del ángel que tanto conocemos a través de las religiones.
Cuando pinto mis cuadros, siempre me acompaña la sensación de que no estoy solo. No hablo de espíritus, más bien de conexión con algo mayor. Es como si entrara en un estado de semi trance donde el tiempo desaparece. Creo firmemente que toda forma de creatividad abre las puertas del no tiempo, de la conexión con nuestra conciencia infinita.
Durante esa reconexión con nuestro flujo real de información, teniendo en cuenta que todo es energía conectada entre sí y que nada está realmente separado, no me parece descabellada cualquiera de las posibilidades. Conexión es conexión, y la cuántica ya nos ha demostrado que todas las posibilidades de existencia pueden estar conviviendo en realidades paralelas en un eterno ahora.
El caso es que emisor y receptor vibren en una frecuencia similar. Y eso vale igual para diferentes planos de existencia. Lo mismo vale para conectar con la conciencia universal que con la energía del abuelo que murió o el artista que desea seguir pintando, como con una parte de uno mismo desde otra realidad paralela.
A partir de ahí, saquen ustedes sus propias conclusiones una vez hayan visto trabajar a este peculiar médium llamado Luiz Gasparetto.
Víctor Brossa
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